España lleva casi dos años creando empleo, pero muy precario : en 2015, el 92% de los nuevos trabajos fueron temporales y el 35% por horas .
Somos el segundo país de Europa con más empleo temporal, tras Polonia : 1 de cada 4 trabajadores tienen contrato con fecha de caducidad. Muchos dirán: mejor un trabajo precario que estar en paro . Sí, pero cuidado : tanto empleo precario no sólo perjudica a los que lo tienen, sino a todo el país : tira hacia debajo de los sueldos , hay más riesgo de quedarse en paro , se cotiza poco y las pensiones tienen un peligroso “agujero”, se compran y alquilan menos viviendas , los jóvenes no se emancipan , nacen menos niños , hay más desarraigo social y político y los trabajadores precarios son menos productivos, consumen poco y se crece menos. El trabajo precario es un cáncer para la economía . Urge mejorar la calidad del empleo , no sólo por dignidad, también para conseguir un crecimiento mayor y más estable. Nos importa a todos.
La precariedad en el empleo no es algo exclusivo de esta crisis: España la lleva sufriendo 30 años . Los contratos temporales surgieron con fuerza en la crisis de los años 80 , cuando el Gobierno de Felipe González aprobó, en 1984, el contrato temporal no causal , con una indemnización más baja que la de los contratos indefinidos. En 1.987 ya hay un 23% de contratos temporales y siguen creciendo en los años 90, hasta llegar a un récord del 40% de contratos temporales en 1995. Y en 2007, España tenía un 32% de contratos temporales, el segundo porcentaje mayor de Europa, tras Polonia. Al estallar la crisis , las empresas empiezan a despedir primero a los trabajadores temporales y por eso baja su porcentaje, al 24,98% en 2011. Pero después, suben con la reforma laboral de Rajoy (2012), hasta el 25,66% en 2015 , porque casi todo el empleo que se ha creado en los dos últimos años es temporal. En 2015 , el 91,87% de todos los contratos firmados fueron temporales y sólo un 8,13% fijos. Y lo peor, además, es que cada vez son contratos por menos tiempo : los contratos por 7 días o menos fueron la cuarta parte del total y un tercio fueron por menos de un mes . En la industria , por ejemplo, antes de la crisis se firmaban contratos temporales por 6 meses de media y ahora se firman por menos de dos meses. O sea que si antes se hacían 2 contratos al año por puesto, ahora se hacen 6. Pura rotación : cada vez hay más personas por cada empleo. El otro problema de los contratos temporales es que no se convierten en contratos fijos : entre 2013 y 2014, sólo un 11% de los que empezaron con un contrato temporal consiguieron después un contrato indefinido, según los datos de Empleo. En Europa , esa tasa de conversión de temporales en fijos es el doble, el 28% en la UE-28, aunque en Reino Unido se hacen fijos el 61% de los contratos temporales, en Alemania el 28%, en Italia el 21% y en Portugal el 18%. Así que somos el segundo país de Europa que menos transforma contratos temporales en fijos , sólo por detrás de Francia (10%). La otra cara de la precariedad son los contratos a tiempo parcial , por horas , que también han batido todos los récords en 2014 y 2015. El año pasado, un 35,58% de los contratos firmados fueron por menos tiempo de la jornada normal (y el 89% eran además temporales). Son contratos por horas o por días , aunque en muchos casos es un fraude y el empleado trabaja 8,10 o 12 horas y cotiza por 4 (algo habitual en hostelería y comercio). Las mujeres son las más afectadas: fueron por horas la mitad de los contratos conseguidos en 2015 (47,28%), mientras eran sólo la cuarta parte de los hechos a los hombres (26,5%). Aumentan los que trabajan menos horas, pero a cambio, para compensarlo , los demás trabajadores hacen muchas más horas extras , sobre todo con la reforma laboral aprobada por el Gobierno Rajoy (febrero 2012): se hacían 5.937.100 horas extras semanales a finales de 2015, según la EPA , 600.000 más que a finales de 2011. Y la mayoría, el 54% no se pagan (cuando en 2011 sólo el 49% no se pagaban). Del total de asalariados (15 millones), 727.600 trabajadores hacen horas extras y al 51,6% no se las pagan. Otra forma de precariedad . Y también hay más “precariedad” en los contratos fijos . En 2015, para crearse un puesto de trabajo indefinido hubo que firmar 1,45 contratos fijos, cuando en 2007 eran 1,18 contratos. O sea que la crisis y la reforma laboral han provocado también que haya más rotación en el empleo indefinido : es necesario firmar más contratos fijos para consolidar un empleo permanente. O sea, que también los contratos indefinidos son ahora más inestables . Al final, el aumento de la precariedad desde 2011 configura un mercado laboral donde el 25,66% de los trabajadores tienen un contrato temporal , el segundo mayor porcentaje de Europa, tras Polonia (28% de temporales), casi el doble que en Europa (14%) y por delante de Reino Unido (7%), Alemania (13%), Italia (14%), Francia (16%) o Portugal (22%), según datos de Eurostat . Y el 15,71% de los trabajadores españoles tienen un contrato a tiempo parcial , por horas , aún por debajo de la media europea (19,5% en UE-28), pero con dos importantes diferencias: aquí la mayoría de estos contratos por horas son temporales y no se eligen, sino que se cogen porque no hay otro trabajo. El 62% de los españoles con estos contratos querrían un contrato a tiempo completo, según la EPA , mientras sólo lo tenían “obligados” un 32% en Francia, un 17,5% en Reino Unido o un 13,7% en Alemania, según la OCDE . Como se ve, los datos de la precariedad laboral en España son apabullantes . Un problema que afecta sobre todo a los trabajadores precarios (1 de cada 4 ) , pero también al resto de trabajadores y a todo el país . La primera consecuencia de la precariedad son los bajos salarios, porque es un empleo peor pagado : un trabajador con contrato temporal gana un 37% menos que uno con contrato fijo y un trabajador a tiempo parcial gana la tercera parte que uno a jornada completa, según los datos del INE . Pero además, esos bajos salarios de los precarios “tiran a la baja” del resto de los salarios , provocando que los sueldos de todos los trabajadores bajen (2012-2014) o apenas suban (2015). Y el que no quiera ya sabe: hay 100 esperando por ocupar su puesto ganando la mitad . El resultado es que, con tanta precariedad, el salario más corriente ha bajado a 15.500 euros brutos (unos 1.000 euros netos en 14 pagas), según el INE . Y que el 40% de los asalariados (5,9 millones de trabajadores) ganan menos del salario mínimo (655,20 euros al mes), según UGT . La segunda consecuencia de la alta precariedad es el riesgo de perder el empleo , dado que el 89% de los contratos temporales no se convierten en fijos. Y ese riesgo aumenta si vuelve la crisis, contagiando también a los empleos fijos: la tentación de cambiar empleos fijos por temporales , jóvenes mejor formados y con la mitad de sueldo es muy grande para las empresas. Y además, si estos trabajadores precarios se quedan sin trabajo , cobran menos paro que los trabajadores fijos, porque han cotizado menos. Precisamente, la tercera consecuencia de la alta precariedad es el “agujero” que está haciendo a las cuentas de la Seguridad Social : los trabajadores precarios cotizan menos (menos sueldo) y en consecuencia, aunque en 2015 hubo 530.000 cotizantes más, los ingresos subieron un 1,3%. Resultado: volvió a crecer el déficit de las pensiones (-12.000 millones), por quinto año consecutivo y hubo que echar mano de la hucha (sólo queda ya la mitad) para pagarlas. Y en el futuro, esta legión de trabajadores precarios seguirá cotizando poco , en perjuicio de sus pensiones futuras , que serán más bajas que las de los fijos . Otra grave consecuencia es que los trabajadores precarios (en su mayoría jóvenes y mujeres) no pueden hacer planes de futuro , porque ganan muy poco y además no saben si mañana les renovarán el contrato. Esto les afecta a todos los órdenes de la vida , desde casarse (hay un 22% menos de matrimonios que en 2007) y tener hijos (más tarde, a los 31,8 años, y menos, 1,32 hijos por mujer) a alquilar un piso (hay que tener 620 euros extras para pagar un alquiler medio) o comprarlo , algo imposible para la gran mayoría de trabajadores precarios (sin un trabajo fijo, no hay hipoteca ni ingresos para pagarla). Resultado: el 78,5% de todos los jóvenes españoles (6,6 millones entre 16 y 30 años) viven con sus padres , sin poder emanciparse. Y muchos, por culpa del paro o de trabajos precarios, no están integrados social ni políticamente , “pasan de todo” y son presa de “populismos” y extremismos. Pero las consecuencias de la precariedad no acaban aquí. A nivel de empresas , los trabajadores precarios son menos productivos , porque les faltan incentivos (es difícil trabajar con ganas sabiendo que es un empleo por una semana) y porque las empresas no invierten en su formación , lo que reduce su eficacia y su empleabilidad futura. Y mirando la economía , los trabajadores precarios gastan menos, con lo que las empresas y el país crecen menos . Cuanto más mileuristas haya, menos crecerá la economía y el empleo. Es de cajón . Por todo ello, la enorme precariedad no es sólo una gran injusticia sino también un disparate económico que frena la recuperación . Urge mejorar la calidad del empleo que se crea. Y aquí hay dos recetas . Una, la de los empresarios y los economistas neo-liberales, que culpan de la precariedad a los contratos fijos : como tienen mucha protección y altas indemnizaciones, los empresarios hacen casi en exclusiva contratos temporales. Pero no es verdad: ni la protección frente al despido ni las indemnizaciones son más altas en España que en el resto de Europa, según este estudio de Antonio González . La diferencia está en que las empresas españolas han abusado del contrato temporal y por horas , utilizándolos para trabajos que son fijos, indefinidos y a tiempo completo . Y más tras la reforma laboral de 2012. La receta de la patronal CEOE para crear más empleo es aumentar la precariedad : pidieron en 2015 ampliar el uso de los contratos temporales , para que puedan encadenarse más de 24 meses y refundir el contrato por obra con el eventual, en un contrato temporal “sin causa” , con una duración máxima de 2 años (un contrato “cajón de sastre ”, con el que se pueda contratar temporalmente para casi todo…). Y en paralelo, los empresarios insisten en pedir los “contratos basura” para jóvenes , con un sueldo inferior al salario mínimo y 12 días de indemnización por año trabajado (los mini-jobs ). O sea, piden más precariedad . Entre tanto, los partidos plantean otras opciones. Ciudadanos defiende el contrato único : que todos los contratos sean indefinidos y con una indemnización menor al principio que vaya creciendo . Suena bien, pero muchos expertos critican que eso sólo serviría para “precarizar todos los contratos ”: reduciría la indemnización de los actuales contratos fijos y en el futuro todos los contratos serían igual de precarios que ahora los temporales (“contrate fijo y despida cuando quiera porque será más barato que ahora” ). Mientras, el PSOE defiende en su programa de investidura que haya sólo tres tipos de contratos (indefinido, temporal y de relevo) y medidas para perseguir la precariedad, con la inspección, penalizando las cotizaciones de los contratos temporales y favoreciendo su conversión en fijos. La principal medida contra los contratos precarios es aplicarla Ley : que no se hagan contratos temporales o por horas para trabajos que son fijos y a jornada completa . Y para eso, hace falta una legislación más estricta , con multas más elevadas para las empresas, y desincentivar los contratos temporales con cotizaciones más altas. Y vigilar más el fraude , con más inspectores de Trabajo (hay 1.878 funcionarios, la mitad por trabajador que en Europa ), que se dediquen más a luchar contra el fraude en los contratos: hoy, los inspectores se dedican a vigilar si el trabajador está dado de alta o comete fraude al desempleo y sólo el 1,13% de su trabajo se dedica a averiguar si los contratos son fraudulentos . Nota de Vredondof - Por favor visita y acaba de leer el articulo en el blog de Javier Gilsanz Economia a lo claro , al autor no le gusta perder y/o no saber el numero de lectores En resumen, la precariedad es un cáncer que se ha adueñado del empleo y daña seriamente a nuestra economía . No podemos seguir compitiendo en base a empresas que hacen trampas y eluden la Ley para rebajar sus costes laborales, empobreciendo a los trabajadores. Y que deterioran la productividad, las pensiones, la familia, la natalidad, el consumo y el crecimiento . Hay que apostar por un nuevo modelo laboral , donde las empresas compitan y ganen dinero con empleos de más calidad , en línea con Europa y no con China o Marruecos. Y eso obliga a una “política de palo y zanahoria” : más inspecciones y más multas a las empresas que “malcontraten” y ayudas e incentivos a las que contraten de forma estable. Es una de las tareas urgentes del futuro Gobierno. La precariedad nos destruye como personas y como país . *
Autor del articulo -Empleo precario: un cáncer para la economía JAVIER GILSANZ Soy un periodista económico que se inició en el periodismo en 1974 y que ha trabajado en periódicos, revistas, Internet, Comunicación corporativa y sobre todo en televisión: 11 años como jefe de Economía de los informativos de TVE (1985-1996) y tres años como jefe de Economía de Tele5 (1987-2000). Doctor en Periodismo, fue director del primer Master de Periodismo Económico en la Facultad de Periodismo de la Complutense y ha dado clase en numerosos Máster de Periodismo
Artículo publicado en Tablon Central: http://tabloncentral.blogspot.com/2016/02/cpt-las-pensiones-perderan-poder.html © Tablon Central *
VRedondoF
** Soy un EMPRESARIO JUBILADO que me limito al ARCHIVO de lo que me voy encontrando "EN LA NUBE" y me parece interesante. **
** Lo intento hacer de una forma ordenada/organizada mediante los blogs gratuitos de Blogger. **
** Utilizo el sistema COPIAR/PEGAR, luego lo archivo. ( Solo lo INTERESANTE, según mi criterio). **
** Tengo una serie de familiares/ amigos/ conocidos (yo le llamo "LA PEÑA") que me animan a que se los archive para leerlo ellos después. **
** Los artículos que COPIO Y PEGO EN MI ARCHIVO o RECOPILACIÓN (cada uno que le llame como quiera), contienen opiniones con las que yo puedo o no, estar de acuerdo. **
** Si te ha gustado la publicacion, lo mejor que debes hacer es ir al blog/pagina del autor y DEJAR UN COMENTARIO. En mi blog no puedes dejar comentarios, pero si en el del autor. **
** Cuando incorporo MI OPINIÓN, la identifico CLARAMENTE, con la única pretensión de DIFERENCIARLA del articulo original. **
** Pido perdon por MIS limitaciones literarias. El hacerlo mejor (no mucho) me cuesta dedicarle MAS TIEMPO, y la verdad es que (ademas de no tener tiempo) tengo poca paciencia, por ello, y nuevamente, pido disculpas por las susodichas limitaciones. **
** Mi correo electrónico es vredondof (arroba) gmail.com por si quieres que publique algo o hacer algún comentario. **
** Por favor! Si te ha molestado el que yo haya publicado algún artículo o fotografía tuya, ponte en contacto conmigo (vredondof - arroba - gmail.com ) para solucionarlo o retirarlo. **
--
Publicado por cc.co2.vrf para
CPT el 2/24/2016 06:30:00 a. m.